Powered By Blogger

martes, 7 de agosto de 2012


Sistema óseo

 

 

El cuerpo humano es una complicada estructura que contiene más de doscientos huesos, un centenar de articulaciones y más de 650 músculos actuando coordinadamente. Gracias a la colaboración entre huesos y músculos, el cuerpo humano mantiene su postura, puede desplazarse y realizar múltiples acciones. 

El conjunto de huesos y cartílagos: forma el esqueleto.
El tejido óseo combina células vivas (osteocitos) y materiales inertes (sales de calcio y fósforo), además de sustancias orgánicas de la matriz ósea como el colágeno, proteína que también está presente en otros tejidos. Los huesos son órganos vivos se están renovando constantemente. 

Las funciones del esqueleto son múltiples: 

Sostiene al organismo y protege a los órganos delicados como el cerebro, el corazón o los pulmones, a la vez que sirve de punto de inserción a los tendones de los músculos.
Además, el interior de los huesos largos aloja la medula ósea, un tejido que fabrica glóbulos rojos y blancos. La cabeza está constituida por el cráneo y la cara. Es una sucesión compleja de huesos que protegen el encéfalo y a otros órganos del sistema nervioso central (ver Sistema Nervioso) También da protección a los órganos de los sentidos, a excepción de el tacto que se encuentra repartido por toda la superficie de la piel.
 

La columna vertebral es un pilar recio, pero un poco flexible, formada por una treintena de vértebras que cierra por detrás la caja torácica. En la porción dorsal de la columna, se articula con las costillas.

El tórax es una caja semirrígida que colabora activamente durante la respiración.

En el cuerpo humano existen 208 huesos: 

  • 26 en la columna vertebral. 
  • 8 en el cráneo. 
  • 14 en la cara.
  • 8 en el oído. 
  • 1 hueso hioides.
  • 25 en el tórax.
  • 64 en los miembros superiores.
  • 62 en los miembros inferiores.
Hay varios tipos de huesos: 
  •  Largos, como los del brazo o la pierna. 
  •   Cortos, como los de la muñeca o las vértebras. 
  •  Planos, como los de la cabeza
 En esta imagen puedes ver un ejemplo de hueso largo, corto y plano:


Algunas características: 

Son duros. Están formados por una substancia blanda llamada osteína y por una sustancia dura formada por sales minerales de calcio y fósforo. Los huesos largos tienen en su parte media un canal central relleno de médula amarilla, y las cabezas son esponjosas y están llenas de médula ósea roja. 

Su función:

Dar consistencia al cuerpo.
Ser el apoyo de los músculos y producir los movimientos.
Sirven como centro de maduración de eritrocitos (glóbulos rojos).
 

División Del Cuerpo Humano Para El Estudio Del Sistema Óseo: 

El cuerpo humano se divide de la siguiente manera para que sea más comprensible y universal:
Cabeza Tronco y Extremidades.


Huesos de la cabeza


Los huesos del cráneo son 8 y forman una caja resistente para proteger el cerebro.  Los huesos de la cara son 14. Entre ellos los más importantes son los maxilares (superior e inferior) que se utilizan en la masticación. Hay un hueso suelto a nivel de la base de la lengua; llamado hioides, en la que sustenta en sus movimientos. 

Huesos del tronco



La clavícula y el omóplato, que sirven para el apoyo de las extremidades superiores.
Las costillas que protegen a los pulmones, formando la caja torácica.
El esternón, donde se unen las costillas de ambos lados. (anterior)
Las vértebras, forman la columna vertebral y protegen la médula espinal, también articulan las costillas. (Posterior).
La pelvis (ilion, isquión y pubis), en donde se apoyan las extremidades inferiores.

Huesos de las extremidades superiores



Clavícula, omoplato y húmero formando la articulación del hombro
El húmero en el brazo.
El cúbito y el radio en el antebrazo
El carpo, formado por 8 huesecillos de la muñeca.
Los metacarpianos en la mano.
Las falanges en los dedos.

Huesos de las extremidades inferiores 


La pelvis y el fémur formando la articulación de la cadera.
El fémur en el muslo
La rótula en la rodilla.
La tibia y el peroné, en la pierna
El tarso, formado por 7 huesecillos del talón.
El metatarso en el pie
Las falanges en los dedos.

Las Articulaciones 

Son las zonas de unión entre los huesos o cartílagos del esqueleto. Se pueden clasificar en: sinartrosis, que son articulaciones rígidas, sin movilidad, como las que unen los huesos del cráneo; sínfisis, que presentan movilidad escasa como la unión de ambos pubis; y diartrosis, articulaciones móviles como las que unen los huesos de las extremidades con el tronco (hombro, cadera).
Las articulaciones sin movilidad se mantienen unidas por el crecimiento del hueso, o por un cartílago fibroso resistente. Las articulaciones con movilidad escasa se mantienen unidas por un cartílago elástico. Las articulaciones móviles tienen una capa externa de cartílago fibroso y están rodeadas por ligamentos resistentes que se sujetan a los huesos. Los extremos óseos de las articulaciones móviles están cubiertos con cartílagos lisos y lubricados por un fluido espeso denominado líquido sinovial producido por la membrana sinovial. La bursitis o inflamación de las bolsas sinoviales (contienen el líquido sinovial) es un trastorno muy doloroso y frecuente en las articulaciones móviles.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario